Garganta La Olla es un pueblo que pertenece a la provincia de Cáceres, y es en él donde nace la leyenda de La Serrana de La Vera. Cuenta la leyenda que una hermosa joven llamada Isabel de Carvajal residente en Garganta la Olla, y comprometida con el también joven sobrino del obispo de Plasencia, se echó al monte cuando éste la abandonó por su carrera eclesiástica. Desde ese momento y llevada por la deshonra y la venganza deambula por los montes de Gredos vestida de cazadora, cual amazonas arrastra a los hombres a su cueva y después de usarlos para complacer sus deseos los mata. Es una leyenda tan arraigada que incluso en la actualidad hay una ruta que en su honor recorre los lugares más destacados de sus dominios.
Parece incluso que la gente tiene todavía claro donde se encontraba ubicada su cueva, está a cinco leguas de Plasencia, entre los pueblos de Piornal y Garganta. Y fue allí donde La Serrana de La Vera juró vengarse de todos los hombres. Pues bien, la ruta que nos ocupa hoy va desde Piornal a Garganta, tiene 19 kilómetros y discurre en su gran mayoría por las crestas de la sierra. Es una ruta señalizada en blanco y amarillo (señalización local) aunque no en todos los tramos lo que le añade dificultad, y además en los últimos cuatro kilómetros hay un descenso acumulado de 800 metros. En alguno de los tramos aunque sí encontramos la señalización no existe camino, por lo tanto habrá que caminar entre maleza y con cuidado de no perderse.
Desde la cresta de la sierra lo que se observa son paisajes de montaña, los Montes de Tras La Sierra y debajo el Valle del Jerte. Se pasa del Jerte a La Vera por el Puerto de Piornal, se trascurre unos cuantos metros por la carretera que conduce a Garganta La Olla y se encontraran con un nuevo paisaje “la comarca de La Vera”. Desde aquí ya verán el pueblo de Garganta La Olla que está enclavado en un pequeño valle, pues lo mejor es rodear ese valle y bajar por La Portilla hasta el mismo pueblo.
Después de salir del pueblo caminarán por el Pico del Puerto hasta llegar al Pico de la Tartajosa, un camino amplio les conducirá hasta el Cancho Negro donde dicen que se encontraba la cueva de la Serrana. Desde aquí comienza el descenso por el conocido paraje Los Cristianillos hasta llegar a la garganta mayor sobre la que está construido el puente Pivilla, un hermoso puente de piedra perdido en el bosque y casi olvidado. A partir de este momento el camino se estrecha y se convierte en un zigzagueo constante. Seguimos descendiendo por la Era de las Cruces y atravesamos el camino que conduce a Yuste. Ya sólo queda una última subida por el Baldío de las pájaras para alcanzar el Risco de la Portilla y de ahí comienza el descenso de los últimos cuatro kilómetros, el tramo más duro sin duda.
Un pequeño sendero que rodea la Portilla os hará disfrutar de las maravillosas vistas de la comarca de La Vera, aunque el descenso será duro sobre todo por lo largo y la inexistencia de camino. Bajan hasta el abrevadero de Fuente Blanca, y desde allí otro pequeño camino nos llevará hasta el pueblo de Garganta la Olla, entrarán por la parte más baja del pueblo y encontrarán la estatua en honor a la Serrana de La Vera.